domingo, 3 de abril de 2011

Desde hace diez años Abril para vivir es una cita ilusionada que llena algunas de las más bellas plazas de Granada de música, de poesía, de la voz de cantautores. Abril para vivir es un eco de la voz de Carlos Cano, una canción que sigue iluminando con su letra cada espacio, cada nota de una música que se crece con el paso del tiempo. Nos hace sentir que la primavera no es sólo una estación del tiempo sino también un estado donde la música es capaz de apoderarse de las calles para convertirse en una esperanza de presente cierto. Una sonrisa es capaz de convertir una tarde de nubes oscuras en una aventura de lluvia y una canción nos hace descubrir que nuestro interior es un río de notas donde la poesía puede brotar hasta convertirse en un manantial de palabras.

En la tarde del pasado viernes, día 1 de abril, una de las actividades enmarcadas dentro de la programación de Abril para vivir, que se celebró el la plaza Bib-Rambla, fue la lectura poética organizada por Granada13artes, en torno a “La lucha contra el hambre” que este año ha sido el lema que Abril para vivir ha escogido como acción social.

Entre cantautores como Mario Ojeda, Alberto Alcalá, Fede Comín entre otros, se unieron, en un acto presentado por nuestro compañero y uno de los organizadores de Abril para vivir, Juan Trova, las voces de Candela Guirao, Marcelo Orozco, Marcos Jiménez, Francois Souchet, Rubén Darío, Paco Vaquero, Chema Cotarelo, Mª Carmen Párrizas, Alicia Cavagnaro, Alicia Choín, Rosario Sáez y Yolanda López. Durante una hora y media la poesía fue la protagonista, la esencia de cada instante donde cada uno de los presentes supo decir el verso necesario, el poema encendido, para que la tarde fuera nueva y distinta en cada forma de decirlo. Desde el verso comprometido al festivo, desde el poema que denuncia al poema que llora, desde la palabra que dice basta hasta la palabra esperanzadora, todos fueron dejando parte de si mismo.

La tarde continuó celebrándose en las cafeterías de la plaza Bib-Rambla como si la vida siguiera ajena a otros lugares, a otros espacios, a otros mundos. La gente paseaba entre el bullicio, el acto concluía. Tal vez la palabra sea un instrumento, tal vez sólo sea un sonido estético, pero seguro que si mueve sentimientos es capaz de que, al menos los que esa tarde pronunciamos la palabra Poesía, sintieramos que son precisos actos como el de Abril para vivir comprometido con la sociedad y con los que lo necesitan.

2 comentarios:

  1. pienso que lo mas importante fue poder participar en el acto,y sobretodo poder compartir estos momentos con gente tan maravillosa como vosotros,nos vemos en las siguientes...

    ResponderEliminar
  2. Lo pasamos muy bien. Y la cervecilla de luego fue genial. ¡Tenemos que repetirlo ya!

    Besos,

    Alicia

    ResponderEliminar